He votado en contra de este texto legislativo porque estimo muy peligroso establecer baremos, calificaciones y distinciones entre inversiones virtuosas e inversiones negativas, en un mundo tan complejo e interrelacionado, cuando arrastras millones y millones de recursos y dinero. Iba a abstenerme, pero he votado en contra cuando, además, veo que se acompaña de afirmaciones absolutamente contrarias a la ciencia y a la realidad. Por ejemplo, quitar a la investigación en temas nucleares de fusión nuclear por insostenible, lo que es una barbaridad. Es ya excesivo; parece que la taxonomía está al servicio de intereses financieros, corporativos y lobistas muy concretos.